Crónica

Bettina Horst


Un mundo privado

Cuando habla, jamás titubea. Sus desplantes públicos son de factura perfecta, a veces apoyada de discursos previamente redactados; otras, con apuntes que anota y repasa cuando es interpelada en algún debate de ideas. Siempre parece estar muy preparada.

Es que Bettina Horst  no es una desconocida en el mundo del poder. Lleva años apareciendo en los principales medios de prensa, primero como analista y luego como directora del think thank de derecha Libertad y Desarrollo (LyD). Desde marzo pasado suma otra vitrina: es integrante del Comité de Expertos constitucional, en cupo patrocinado por la UDI. 

Es la única economista del grupo.

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Bettina Horst estudió Ingeniería Comercial en la Universidad Gabriela Mistral. A los 24 años entró a trabajar al Banco Central, donde llegó a ser Jefa del Área Monetaria del Departamento de Estudios. Estuvo allí hasta el 2000. 

Un año después obtuvo su título como Magíster en Economía mención Políticas Públicas en la Universidad Católica. Se ha desempeñado como miembro del Consejo del Sistema de Alta Dirección Pública Empresas Públicas y en 2021 fue nombrada por segunda vez como una de Mujeres Líderes, por El Mercurio y Mujeres Empresarias.

En 2018 partió como analista del LyD, centro de estudios fundado por ex ministros de Pinochet a principios de los noventa. Cinco años más tarde, se transformó en su directora. Sus principales ponencias defienden la libertad económica y avanzar hacia espacios donde los actores del mundo privado sean igual de relevantes que el Estado. 

“El objetivo es que sea una Constitución fome y sin etiquetas (...) Una Constitución no es un programa de gobierno, no es una declaración de buenas intenciones.”

En entrevista en El Mercurio, en marzo, cuando ya había sido nombrada experta, Horst definió lo que espera sea el actual proceso: “El objetivo es que sea una Constitución fome y sin etiquetas (...) Una Constitución no es un programa de gobierno, no es una declaración de buenas intenciones”. 

En ese diario escribe frecuentemente columnas. Solo el año pasado se refirió más de diez veces a temas públicos: los resultados de la encuesta CEP, el costo de la pensión garantizada universal y que sólo un 3% de la población cree que el gobierno debería poner mayor esfuerzo para solucionar el tema constitucional.

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Durante el proceso constitucional anterior, Bettina Horst fue invitada a varios programas de televisión en CNN, 24 Horas y Canal 13 para debatir sobre aspectos como estados regionales o pensiones. Ella siempre estuvo en defensa del “Rechazo”, aunque reconocía algunos elementos interesantes, como la descentralización y la universalidad de la previsión pero en el contexto de un  Estado unitario y  fondos en mano de a cada trabajador. 

En sus apariciones mediáticas también precisó una y otra vez que la Constitución actual no era de derecha. Que si bien había sido redactada inicialmente en 1980 también tenía modificaciones hechas durante los años siguientes al regreso de la democracia.

A pocas semanas de iniciado el nuevo proceso, Bettina Horst ha dado un par de declaraciones. El 3 de abril, en una reunión de todos los comisionados, abogó por la libertad de elección. “Uno de los aspectos que generó harto debate dentro de la comisión fue precisamente el que tiene que ver con la libertad de elección (…) Hoy se mantiene en la constitución la coexistencia de un sistema de salud privado y un sistema estatal, entregándole la libertad de elegir entre uno y otro sistema, a algunos quizás eso no les gusta, pero hoy día la norma constitucional en nada inhibe que el sistema de salud estatal se fortalezca y sea mejor y sea más eficiente (…) La solidaridad no puede estar por sobre la libertad de elección”.

Integra la Subcomisión de Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Medioambientales, pero no la preside.

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La economista, además de dirigir Libertad y Desarrollo, es presidenta de la mesa directiva de la Red Liberal de América Latina (RELIAL) y fue Senior Fellow en Atlas Economic Research Foundation en Washington D.C. Todas organizaciones no gubernamentales que defienden la libertad como principio del ejercicio político y económico.

Su vida privada tampoco está lejos de la política y de la derecha. En 1994 se casó con el entonces diputado UDI Darío Paya, quien fue electo por cuatro períodos seguidos en las comunas de Lo Espejo, Pedro Aguirre Cerda y San Miguel.