Criado en Villa Crespo, Sergio Wischñevsky cumplió con todo el cursus honorum de un judío porteño hasta que repetió en la escuela técnica ORT. A los 17 años experimientó por primera vez la educación pública. En el año 1984 la política lo cautivó y se volvió un militante, mientras trabajaba como repositor de supermercados, puesto que ocupó por varios años.

 

Quería ser Rodolfo Walsh, así que dejó psicología para empezar Ciencias de la Comunicación pero después se cambió a historia.

 

Al llegar a la universidad tenía una especie de enamoramiento con todas esas almas que él creía puras porque habían elegido carreras tan poco materialistas y tan idealistas como filosofía, antropología, educación, historia, etc. Se sentía feliz de ser parte de eso. Después todo se matizó muchísimo, suele decir.

 

Fue profesor universitario y también de escuelas secundarias, más tarde se convirtió en Rector de la Escuela del Caminante. 

 

Se recibió de profesor superior en Historia en Universidad de Buenos Aires; Facultad de Filosofía y Letras. Hizo el posgrado “Gestión de las Instituciones educativas” (FLACSO 2002) y el Master en Ciencias Sociales con especialización en Historia (Universidad de San Martín).

 

En año 2006 comenzó a tener una columna de historia diaria en canal 7 y de allí derivó al mundo radial. Más de mil columnas de historia hechas al calor de la agenda periodística, le permitieron unir tres pasiones: historia, política y periodismo.

 

Lo mejor que le pasó a Sergio en su carrera fue haber podido girar hacia los medios de difusión. Tenía mucho miedo de terminar haciendo investigaciones de las que nadie se enterara. También haber descubierto los libros de Carlo Ginzburg.