Alejandro Frenkel nunca fue bueno en matemática, así que sabía que iba terminar estudiando alguna de las ciencias sociales. Cuando llegó el momento de decidir estaba entre historia y ciencia política. Con su hermana mayor fue al jardín, a la primaria y a la secundaria. Ella ya había empezado a estudiar historia y, para diferenciarse, se decidió por la Ciencia Política. Estudió en la Universidad de Buenos Aires y se recibió con Diploma de Honor. Luego, hizo un posgrado en la Pontificia Universidad Católica de Sao Paulo.

Le gusta el olor a pasto húmedo, antes de jugar al fútbol.

Becario del CONICET, fue asesor del Ministerio de Defensa y Delegado argentino en el Consejo de Defensa Sudamericano de la UNASUR.

Marca los libros con una letra ilegible. Casi siempre con lápiz, a menos que sea un libro poco importante o uno que, cree, nadie más va a leer.